El láser de baja intensidad hace que los folículos del pelo que están en fase de reposo se reactiven generando un nuevo pelo más grueso, más fuerte y con más volumen. Por este motivo, ha surgido iGrow, el regenerador capilar de uso doméstico que utiliza una terapia con láser de baja intensidad emitido por diodos junto a luz roja emitida por LED (LLLT). De esta forma, el láser produce una estimulación de las células de la raíz del folículo piloso que están en fase de reposo y mejora la circulación sanguínea del bulbo del pelo.

La Agencia de Alimentación y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) ya ha dado su aprobación para el uso de este dispositivo con tecnología LLLT para el tratamiento de la alopecia tanto en hombres como en mujeres. Por otra parte, también avala que a las 16 semanas de usar iGrow se aprecia una parada de la caída excesiva de cabello, y un incremento de pelo nuevo de un 39% en hombres y un 37% en mujeres.

La principal novedad de iGrow es que no provoca efectos secundarios de ningún tipo ni tiene contraindicaciones.